¿Te cansas fácilmente? ¿Te quejas de mucho dolor de cabeza?, tu agotamiento puede comenzar con pequeños signos fisiológicos (fatiga, dolores de cabeza o reflejos lentos) que pueden progresar a mareos, falta de coordinación, debilidad muscular o visión borrosa, lo que lleva a otros problemas como presión arterial alta, trastornos del sueño y problemas digestivos.
¿Los chistes de tu pareja y no te causan gracia? ¿Todo y todos te caen mal?
Puedes notar un aumento del mal humor, irritabilidad o falta de concentración, lo que podría progresar a un deterioro del juicio y la capacidad de toma de decisiones, problemas de memoria y falta de motivación, lo que lleva a otros problemas como sentirse impotente, desconfiado y desilusionado.
En general, estos síntomas pueden tener un efecto profundo en tu vida personal y profesional.
Y es posible que descubras que te falta la energía para participar en actividades que alguna vez disfrutaste sola o acompañada.
Aprender como recuperar tu energía personal, no solo es tema de los amantes de los deportes.
¿Y cómo vas a lograr que suceda? Con conocer y practicar estrategias que te permitan incrementar no solo tu energía personal, física y emocional también; haciendo que estas te lleven a ese estado mental de optimismo y entusiasmo por la vida que te mereces.